UN APODERADO COMPROMETIDO CON LOS VALORES DEL COLEGIO
El jueves 13 de noviembre, a los 51 años, falleció Ricardo Jiménez Zambra, producto de un infarto de miocardio.
Integrante activo del Centro de Padres, madres y apoderados y, junto a su señora, fundador del grupo folclórico del Colegio Intercultural Trememn.
Aquel día jueves 13, las banderas institucionales del Colegio se izaron a media asta, el duelo comenzaba tras la muerte física de Ricardo Jiménez Zambra, apoderado del sexto básico B y tesorero del Centro General de Padres y Apoderados.
A las cuatro de la madrugada falleció en la Clínica Tabancura quien fuera una de las personas más entusiasta del Centro General de Padres y Apoderados, riguroso en la planificación de actividades y un convencido que la comunicación es un factor relevante para construir identidad como Colegio. Siempre reparaba en la importancia de la visibilidad del centro de padres “debe ser una tarea permanente, debemos promover las actividades familiares en el Colegio, involucrar a las familias…los días sábados abrir las puertas para las familias de nuestra comunidad”, señaló en una de sus últimas reuniones del CGPA.
Ricardo, como apoderado del séptimo B, también estuvo a cargo de la tesorería, y es que ponía al servicio de los colectivos su experiencia como profesional. “Organizó y estructuró un sistema control de los ingresos y egresos del Centro de Padres y construyó un cuadro que nos permite revisar el estado de avance de nuestras actividades planificadas para el año: su famoso cuadro de mando”, señala Claudio Escudero, secretario de la organización.
Uno de los momentos más simbólicos y emotivos se dio en la Capilla de la Iglesia Santa Marta de la comuna de Ñuñoa, lugar donde se realizó el velatorio de Ricardo. Al lugar llegaron los integrantes del grupo folclórico con sus instrumentos, dejando a los pies del féretro una guitarra “como señal de que su presencia estará siempre en nuestro grupo”, señaló Roxana Olivares, apoderada de séptimo.
Junto con el canto del grupo se instaló una fotografía de la última presentación del grupo Folclórico Trememn y un texto que reza “Amante de tus raíces, incansable promotor de la organización…RICARDO, nuestras guitarras y tu memoria serán un acorde eterno”. Texto que fue leído entre palabras cortadas por el apoderado de Primero Medio A., Roberto Astudillo, quien señaló que “Ricardo nos dejó la vara muy alta, su compromiso con el Colegio, con los padres y apoderados, el deseo de ver una comunidad unida y su sensibilidad ante las cosas simples. Me duele su ausencia”.
UNA COMUNIDAD PRESENTE
Un centenar de personas llegaron a la iglesia ubicada en la comuna de Ñuñoa, ahí estaban los alumnos y alumnas compañeras de Isabel Jiménez Munita, con su profesora Jefe, Anita Fores. También llegó al lugar Marisol Contreras, secretaria del Colegio, Carlos Toledo (asistente), el director Orlando Córdova, y la directiva del Centro General de Padres y apoderados. La presencia del Colegio Trememn, acompañando a la familia, como un agradecimiento a la labor realizada por Ricardo Jiménez y su compromiso con el Proyecto Educativo Institucional que, solo el jueves anterior, estaba analizando con la dirección del colegio.
“Es un dolor enorme pero el mejor homenaje a Ricardo es seguir trabajando por nuestra comunidad y cumplir con los objetivos que nos propusimos para el 2015, estamos viviendo el luto, es cierto, pero nos reuniremos igual este viernes tras haber dejado a nuestro amado amigo en el cementerio. El sábado seguiremos con nuestros ensayos. Ese es nuestro homenaje”, señaló, emocionado Jaime Meza.
Pasadas las 15 horas del día viernes catorce de noviembre comenzaba la caminata con la familia Jiménez, sus amigos (as), familiares y los representantes de la comunidad Trememn. Una vez reunidos en el lugar donde yace el cuerpo se dio inicio a las intervenciones de los asistentes. Su cónyuge, cómplice, amada y compañera, Verónica Munita, con palabras tan serenas como profundas se despidió de su compañero y amigo, haciendo presente del amor inconmensurable que nació entre los dos. “A Ricardo siempre lo movió el amor, era un ser de puro amor…un hombre perfecto”, culminaba Verónica en su intervención.
Luego, la hija mayor realizó una breve biografía de su padre, donde el elemento común era su sensibilidad por lo social, por el folclore, por la organización. “Mi padre era un hombre ordenado, disciplinado, metódico; siempre habló del valor de la lealtad hacia las personas y hacia los proyectos”, señaló.
Se fueron sumando las intervenciones de amigos y familiares. Luego se escucha unos suaves acordes de una guitarra, instante en que Verónica explica que aquella canción le gustaba mucho a Ricardo, se trata del poema de Gabriela Mistral musicalizado por el grupo nacional Inti -Illimani: La Pajita.
Al ser consultados los integrantes del Centro de Padres, señalaron que Ricardo se queda entre nosotros pero no solo en el recuerdo, sino en las acciones, en las tareas que nos hemos propuesto como equipo humano.
Jaime Meza, afirmó que “seguiremos construyendo comunidad, seguiremos construyendo familia Trememn y en cada mirada de nuestros hijos e hijas estará presente el alma de niño que fue Ricardo. Un hombre que dedicó largas horas al trabajo voluntario, un entusiasta promotor de los valores institucionales. Dirigente de una organización que sabrá honrar su nombre. Por siempre”.
CGPA.